Los derechos sexuales son la posibilidad que todas las personas tenemos de ejercer nuestra sexualidad de manera libre, informada, saludable y satisfactoria. Esto quiere decir que cada persona tiene la posibilidad de decidir libre y responsablemente el modo en que se ejercen los derechos sexuales, libre de discriminación y de violencias, sin miedos, vergüenza, temores, inhibiciones, culpa, creencias infundadas o prejuicios.
Los derechos sexuales incluyen el derecho a recibir atención en salud sexual y salud reproductiva, direccionada a la prevención y atención de Infecciones de Transmisión Sexual - ITS y de enfermedades y molestias o dolor que afecten el ejercicio placentero de la sexualidad.
En relación a los derechos reproductivos, todas las personas están en pleno derecho a tomar decisiones libres, responsables y sin discriminación, respecto al número de hijos que quieren tener y el tiempo que debe transcurrir entre un nacimiento y otro. Se incluye el derecho a tener acceso a servicios de salud reproductiva que garantice una maternidad segura, el derecho de las mujeres a la interrupción voluntaria del embarazo en los casos en que la ley lo establece, a la prevención de embarazos no deseados y la prevención y tratamiento de dolencias del aparato reproductor como el cáncer de útero, mama y próstata.
A continuación, se reconoce la garantía de los Derechos Sexuales y Derechos Reproductivos, conócelos y exige que se respeten:
En el escenario nacional con Marco político de la salud y derechos sexuales y reproductivos, se propone la gestión de recursos para las acciones de la política? y la reparación de los daños en los casos que los derechos relacionados fueran vulnerados y mediante el estímulo de la participación activa de las personas en los espacios públicos donde se tratan asuntos relacionados con la sexualidad y la reproducción.
La siguiente infografía nos recuerda la normatividad en la sustenta la garantía de los derechos sexuales y reproductivos: